Otoplasia - Mundo Cirugía

Otoplasia

¿Qué es la otoplasia estética?

La otoplastia es la cirugía que se realiza para reposicionar las orejas prominentes o ‘de soplillo’ a una posición más normal, más pegadas a la cabeza, o para reducir el tamaño de las orejas grandes.
También pueden reducirse los lóbulos de las orejas cuando éstos son excesivamente grandes.

¿Cómo se realiza la otoplasia?

Se realiza bajo anestesia local y sedación y no requiere ingreso, pudiendo el paciente retirarse a casa a las pocas horas de realizada la cirugía. Una vez dormido el paciente al que se realizará la otoplastia, se esteriliza el campo quirúrgico y se procede a la operación.

Postoperatorio de la otoplasia

La otoplastia no suele tener un postoperatorio doloroso. Si se produce dolor, será controlado con analgésicos. Tras la cirugía, al paciente se le colocan vendajes para mantener la zona operada limpia, protegerla de golpes y brindar apoyo a la nueva posición de las orejas durante el proceso inicial de curación. La cicatriz de esta intervención no es visible al colocarse en el pliegue posterior de la oreja y la incorporación a su vida habitual se produce al tercer o cuarto día, teniendo que llevar el paciente una banda de sujeción solamente por la noche durante las tres primeras semanas.

Riesgos de la otoplasia

Cicatrices: es probable que queden escondidas detrás de las orejas o dentro de los pliegues de las orejas.
Asimetría de las orejas: Esto puede ocurrir como resultado de los cambios durante el proceso de cicatrización.
Cambios en la sensibilidad de la piel: Durante la otoplastia, el reposicionamiento de las orejas puede afectar temporalmente la sensibilidad de la piel en esa zona.
Sobrecorrección: La otoplastia puede crear contornos poco naturales que hacen que las orejas parezcan aplastadas.
Al igual que cualquier otro tipo de cirugía mayor, la otoplastia conlleva el riesgo de sangrado, infección y una reacción adversa a la anestesia.